¡Oh, Milagrosa Santa muerte,
Niña Blanca de mi corazón y brazo derecho de Dios Nuestro Señor,
Hoy me acerco a ti con infinita devoción, para implorarte me concedas:
Salud, fortuna y suerte!
Quita de mi paso con tu guadaña la envidia y la desdicha,
Que las injurias de mi enemigo no alcancen ni dañen mi espíritu.
¡Que nadie detenga la prosperidad que hoy te pido!
Poderosa Señora Mía,
Bendice el dinero que llegue a mis manos, multiplícalo para que a mi familia nada le falte
Y yo pueda tenderle la mano al necesitado que cruce por mi camino.
Gloriosa Santa Muerte
Sé mi protectora y mi camino de luz,
Sé mi abogada ante el Redentor,
Sé mi verdad en tiempos de oscuridad,
Concédeme la fuerza y la fe para invocar tu nombre
Y agradecer todos tus favores hoy y siempre.
Amén
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